



Ayer, mientras abría el blog para ver qué cosa podía elaborar para subir, leer comentarios, etc , me dije :
"¡Eh, loco!¡Pará la moto!¡Rescatate!¡bajá un cambio! ¿hace cuánto que no hacés un reagrupe de obra? Ya tenés varias juntadas dando vueltas por ahí, más precisamente en el blog de los amigos Tiburones."
Yo no sé si esta práctica les gusta o no a los preciados lectores. A decir verdad, hasta me parece que se fastidian un poco al no ver cosas nuevas. Yo me fastidiaría, por ejemplo. Comentan bien de puro educados que son, nomás. Bueno, para Uds va la explicación:
Rejuntar la obra desparramada y volver a subirla en este blog representa para mí como el regreso del hijo pródigo a casa. Uno sabe que ya tienen su vida en otro lugar, que ya tienen alas fuertes para volar lejos, entonces la intención pasa por exhibirla orgulloso toda junta y sentirla propia una vez más. Creo con temor a veces infundado, que los sitios donde se alojan pueden desaparecer algún día, entonces se van a poder encontrar acá en lugar de perderse para siempre.
Tengo que cambiar el chip, sino en mi perra vida voy a vender algo. ¿no creen?